Sierra Bacarizo Jiménez, es Pepper Breeder y coordinadora del grupo de breeding EMEA de Sakata Seed. No es habitual encontrar a una mujer desempeñando esta labor, y si las hay no son visibles, un aspecto que con el proyecto Mujer Agro queremos cambiar, y poner en valor el trabajo de estas mujeres agroprofesionales.
¿Desde cuando estás vinculada al sector agroalimentario, y en qué consiste exactamente tu trabajo?
Trabajo en este sector desde 1996, y actualmente como breeder mi labor consiste en desarrollar variedades de pimiento híbridas para el sector hortofrutícola mejorando los materiales existentes e intentando promover una agricultura más sostenible. Un trabajo apasionante puesto que es algo tangible; la investigación vista in situ, y viendo cómo se comportan las plantas según unas predicciones que luego cumplen según un comportamiento en parte condicionado por la genética y el medio ambiente.
Dentro del sector de las casas de semillas, la presencia de la mujer es aún menor, ¿has tenido que demostrar más por el hecho de ser mujer?
En su inicio sí, pero cada vez somos más y me atrevería a decir que en paridad (al menos en el sector semillas). Aunque a nivel técnico de campo o sector comercial puede que aún falte camino por recorrer. Si es cierto que ahora se nos valora mucho más que antes y respetan dentro de un mundo originalmente de hombres. No está siendo fácil pero sí hay cada vez más directivas ocupando puestos relevantes y eso gratifica.
¿Sobre qué acciones crees que se debería de trabajar para seguir construyendo esa necesaria paridad?
Primero que se les dé esa oportunidad a las mujeres, y para ello debería ser más fácil la conciliación familiar. En mi caso los primeros años cuando mis hijos eran pequeños me fue difícil escalar y promocionarme; por ello aún tienen que cambiar mucho las cosas.
